de azucar y de viento

martes, enero 09, 2007


Vivían felices en su mundo de azucar y de viento (G. Belli)

De azucar son los besos de mujeres valientes.
De viento las ideas que cruzan los océanos.
De azucar la mirada mansa del joven-viejo, guerrillero.
De viento las palabras que vienen desde lejos.

De azucar derretida el calor de tus calles, León, ciudad endulzada, la boca del infierno.
De viento los papeles en los que se dibujan sueños, papeles volatines que inundan los desiertos.
De azucar son los ojos de Leana, la risa de los niños, el alma acrisolada, curtida, preñada, de deseos, de luchas, de lamentos.
De viento es la ciudad que crece junto a un río, que revuelve tu pelo, que expulsa los demonios, que hasta allá trajo un día rumores de los nuestros.
De azucar es la tierra que se quiebra y estalla, que alumbra los volcanes, que se extiende hacia adentro. De azucar son sus manos campesinas que arrancan a esa tierra los frutos más sencillos, más ciertos. De azucar los pies descalzos de Miladys, la voz calma de don Carlos, la sonrisa brillante de Marina bajo el palo de mango. De azucar es la plática, las ideas, los sueños, la victoria del frente, la esperanza de nuevo.
De viento es la ciudad, de viento son sus barrios atravesados de un río, nostalgia del océano. De viento las murallas que cuentan secretos susurrando al oído de los juglares muertos. De viento son las torres, el palacio, los puentes, las riberas, la plaza, el sol, los días nuevos.

De azucar y de viento, dos corazones
ardiendo en las orillas
respirando el aliento
de los que esperan transformar
lo podrido
con sonrisas y afectos.
De azucar y de viento bajo la azul mirada del Moncayo y del Cerro.

Azucar tus palabras... calala, ajonjolí, pitaya, mango, plata, la flor del Sacacuanjoche
Viento el cierzo, las trochas, tozolones, cadieras...
De azucar y de viento... "cómo no" "vale, pues"...

Azucar Matagalpa, Estelí, Los Pozitos, Tololar, Palo ´e Lapa, Cartonera, Sutiaba, San Jacinto o Achuapa.
Viento de los Monegros, Madalena, Torrero, Casablanca, Los Mayos...Pirineos

Cien mil cuadras oeste, algunas varas al sur, corazón de un continente, cerebro de una nación... vive mi hermana soñando el fresco viento que llega, barre tristezas, se endulza de modos nuevos... se aleja.

De azucar y de viento las canciones, la voz (de Norma),
las manos (de Araica), ls notas arrancadas, las horas y las noches,
la sensibilidad (de Gabriel), las lágrimas, los roces
y el sonido parido frotando corazones.

Vivían felices en su mundo
de azucar y de viento
De azucar, León, hermana.
Zaragoza, de viento.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Te gusta Gabriel Sopeña? Puedes leer una entrevista extensa en http://www.manuguerrero.es/web/index.php?op=entrevistas

Espero que te guste.